Ello significa que ALSA, tras la Licencia Ferroviaria recibida el pasado mes de abril, dispone de las licencias necesarias para operar servicios ferroviarios de pasajeros tanto de Alta Velocidad, como de Larga y Media Distancia y de Cercanías.
Con la obtención del Cerificado de Seguridad Ferroviaria, ALSA (que desde 2010 ya disponía de la licencia para operar transporte de mercancías) completa la obtención de todos los requerimientos administrativos necesarios para operar ferrocarriles de transporte de viajeros en nuestro país, una vez que el Ministerio de Fomento defina las condiciones de acceso en las que los operadores privados podrán desarrollar esta actividad.