Stalowa Wola ha adquirido los vehículos eléctricos por razones ecológicas y también por razones económicas, ya que estos autobuses tienen un menor coste de explotación. El pedido espera ser recibido en la primavera de 2018 y en él se incluye toda la infraestructura necesaria para poder realizar la carga de los vehículos: tres estaciones de carga con pantógrafo de 200 kW y cinco estaciones de carga con doble enchufe para poder cargar hasta dos vehículos al mismo tiempo. Esto permitirá una mayor comodidad para el conductor, que podrá cargar el autobús sin necesidad de bajarse.
Cada autobús está equipado con un motor de tracción central de 160 kW. El Urbino 8,9 LE eléctrico dispone de cuatro baterías de un total de 160 kWh. Todos los vehículos adquiridos a Solaris cuentan con múltiples comodidades para los pasajeros como puertos USB, Internet WiFi o un sistema CCTV de seguridad. También dispone de un sistema para contar pasajeros y situarlos en los asientos mediante sensores situados en las puertas para una mejor gestión del transporte público de la ciudad.