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Bosch ayuda a las ciudades en la lucha contra la contaminación

Asesora a ciudades alemanas y del resto del mundo sobre la gestión del tráfico

lunes 29 de julio de 2019, 07:00h
En todo el mundo, la gente se desplaza cada vez más de las zonas rurales a las ciudades. Para 2050, habrá más de seis mil millones de personas viviendo en las grandes urbes, el doble que ahora. Durante el mismo período, el volumen de tráfico urbano se triplicará, entre otras cosas, debido a que el continuo auge del comercio online, provocará un mayor crecimiento del tráfico ocasionado por los envíos.
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Una población más densa y un mayor tráfico significan un deterioro de la calidad del aire. En todo el mundo, desde París hasta Shanghái, las grandes ciudades se enfrentan a un gran reto: proporcionar movilidad a las personas y a las mercancías, mejorando al mismo tiempo, la calidad del aire que respiramos. No es una tarea fácil: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 90 por ciento de la población mundial, vive actualmente en zonas donde la calidad del aire es deficiente. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), estima que el impacto económico de la contaminación del aire es de alrededor de 5 billones de dólares en todo el mundo. El aumento de los costes sanitarios representa la mayor parte de esta suma.

"El aire limpio nos concierne a todos", declara Volkmar Denner, presidente del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH. "En Bosch, reconocemos no sólo nuestra responsabilidad global en la acción climática, sino también nuestra responsabilidad local en la lucha contra la contaminación del aire. Para lograrlo, necesitamos más tecnología, no menos. Con una tecnología que es ‘innovación para tu vida’, podemos ayudar a las ciudades y hacer del mundo un lugar mejor". Por ello, Bosch está trabajando tanto por fuera como por dentro del capó del motor, para que la movilidad sea lo más libre de emisiones posible. Además, como empleador, la empresa también está asumiendo la responsabilidad de mejorar la calidad del aire en todo el mundo.

Los avances tecnológicos y los cambios en las políticas han mejorado significativamente, la calidad del aire, especialmente en Europa y Estados Unidos. La mala calidad del aire no se debe únicamente a las emisiones de los vehículos. La industria, la agricultura y el sector energético, también contribuyen a la contaminación del aire en diferentes grados en todo el mundo. Bosch ha desarrollado un sistema de medición de contaminación. Instalada en una carcasa compacta, esta tecnología se está probando actualmente, en el área metropolitana de Stuttgart, París y Marsella. Su objetivo es proporcionar datos fiables sobre la calidad del aire que pueden utilizarse, por ejemplo, para trazar un mapa de la calidad del aire a tiempo real en una ciudad, como base para una gestión del tráfico más eficiente.

Su objetivo es proporcionar datos fiables sobre la calidad del aire que pueden utilizarse

Bosch está utilizando sus conocimientos técnicos y considerables recursos financieros para preparar a los coches para el futuro. Se trata de una doble estrategia: avanzar en el desarrollo de la electromovilidad y conseguir nuevas mejoras en el motor de combustión interna. El objetivo es diseñar un motor de combustión interna que no contribuya a la contaminación atmosférica en nuestras ciudades. Con el desarrollo de nuevas tecnologías para vehículos diésel, Bosch ha dado un gran paso en esta dirección. Esta tecnología, que se está implantando sucesivamente en los vehículos en producción, reducirá la emisión de óxidos de nitrógeno muy por debajo de los límites futuros. Más allá del capó: comprender, planificar y gestionar el tráfico de la ciudad

Las actividades de Bosch para mejorar la calidad del aire van más allá del capó del motor. "Estamos centrándonos en el panorama global", anuncia Denner, "observando las tendencias de movilidad a largo plazo, particularmente en las áreas urbanas". En la actualidad, Bosch mantiene conversaciones con más de 100 municipios y regiones de toda Europa.


Responsabilidad como empresa

La mejor manera de evitar que el tráfico se detenga es evitar la congestión. Este es el principio básico detrás del sistema de gestión de movilidad que Bosch opera para sus empleados. Tan solo en el área metropolitana de Stuttgart, unos 50.000 trabajadores de Bosch, una octava parte de la plantilla global de la empresa, recorren un total de más de 1,5 millones de kilómetros al día. La solución es utilizar autobuses como lanzaderas, que eliminan muchos de estos viajes individuales. Bosch facilita lanzaderas no sólo en Stuttgart, sino también en Estambul (Turquía), Curitiba y Campinas (Brasil), Changsha, Beijing, Shanghái y Suzhou (China). En Shanghái, por ejemplo, diez autobuses de largo recorrido y siete de corto recorrido, transportan más de 1.000 pasajeros al día. Alternativamente, mediante el uso de la plataforma de viaje compartido SPLT, que Bosch adquirió en 2018, los empleados pueden organizar su propio coche compartido y desplazarse juntos para ir a trabajar.