“La digitalización ha sido y será fundamental, porque quien no esté digitalizado no podrá adaptarse a los cambios del mercado y a los del propio consumidor”
Según ha explicado Francisco Aranda, presidente de la Organización Empresarial de Logística y Transporte (UNO), “la digitalización está siendo una herramienta fundamental en esta crisis. Sin ella, sería prácticamente imposible hacer frente a los cambios en la cadena de suministro que ha traído consigo el Covid-19. Hemos pasado de lo que denominábamos flujos tensos a flujos casi extremos, hemos visto cómo la actividad de los operadores se reducía a la mitad por el cierre de comercios y restaurantes por el Estado de Alarma, o cómo el comercio electrónico ha crecido a niveles como los del Black Friday. La digitalización ha sido fundamental en este proceso y lo va a ser también en la recuperación económica, porque quien no esté digitalizado no podrá adaptarse a los cambios del mercado y a los del propio consumidor”.
Con este propósito, y gracias a proyectos de automatización de procesos en el Sector, Minsait ha conseguido en algunos casos reducir en un 50% los tiempos de gestión de los pedidos, integrando los diferentes canales de entrada, así como reducir el tiempo de planificación de los mismos, organización de las rutas y generación de órdenes de transporte, garantizando la llegada de las mercancías cumpliendo los niveles de servicio acordados. Asimismo, se ha apostado por tecnologías de última generación para integrar fórmulas de trabajo alternativas, tanto desde el hogar como en ruta, que han ayudado a los profesionales logísticos a seguir cumpliendo con sus compromisos en un momento en el que estos han alcanzado su mayor pico de incremento.
De esta forma, pese a los cambios en los modelos de trabajo, la tecnología ha hecho posible acelerar hasta en un 87,5% las planificaciones de envíos y aumentar hasta en un 75% los pedidos de transporte planificados. En un momento en el que los flujos logísticos tienen que adaptarse para atender la demanda que llega de la venta online y telefónica, los sistemas de Minsait han ayudado a la toma de decisiones para planificar los distintos envíos no sólo en base a los niveles de servicio acordados, sino también en función de los stocks, las demandas previstas o los propios costes logísticos.
Asimismo, los sistemas de analítica avanzada para la detección de patrones han sido especialmente útiles para organizar el incremento de las demandas, gestionar los picos de trabajo y optimizar las operaciones. Así, el aumento en las operaciones y la alta exigencia del momento ha estado acompañada por una operación mucho más eficiente del sector que no sólo se ha sabido adaptar al incremento de pedidos, sino que lo ha hecho en las mismas condiciones de fiabilidad y eficacia que cuando la actividad era menor.
Trazabilidad y ciberseguridad
Motivada también por la incertidumbre, la trazabilidad de los recursos se ha convertido en una de las funciones básicas para localizar las mercancías en todo momento y obtener información a lo largo de la cadena logística. Se ha aumentado por ello un 60% la utilización de vehículos e intensificado la transparencia en los procesos de envío, así como en los propios gastos de los mismos, con el fin de hacer más eficientes los procesos de acuerdo a la demanda y al momento de excepcionalidad.
Además, en un entorno habituado a la recepción de pedidos y a las transacciones digitales, han aparecido otras posibles coyunturas en las operaciones a las que ha sido necesario dar respuesta, como la propia ciberseguridad. El contexto actual ha precipitado la implantación masiva y en tiempo récord del teletrabajo en muchos departamentos administrativos de las empresas logísticas, sin existir a priori procedimientos ni tecnologías adecuadas que garantizaran el control de los dispositivos y la seguridad en el acceso remoto.
“La tecnología ha evolucionado mucho en los últimos años para cubrir las demandas de un Sector Logístico que se ha adaptado de forma vertiginosa a las demandas de proveedores y clientes que cada vez necesitaban más recursos y pedían nuevos servicios. Llevamos mucho tiempo trabajando en nuevos métodos de trabajo, procesos más rápidos y atenciones más individualizadas que ahora, con el Covid-19 han sido determinantes para incrementar los servicios y cumplir con las exigencias derivadas de la pandemia”, explica Roberto Espina, director de Industria de Minsait.
Un Sector clave que sigue creciendo
Según UNO, el Sector Logístico representa habitualmente el 6% del PIB en España; mueve más de 500 millones de envíos y cinco millones de toneladas al año y agrupa a más de 800.000 trabajadores en un sector que es clave para la industria 4.0 y el comercio electrónico. Con la llegada del Covid-19, estas cifras se han visto afectadas de forma notable, aumentando exponencialmente algunas líneas de negocio como alimentación, farma o comercio online. Un aumento de actividad en el que la tecnología ha sido un gran aliado para completar más rutas e incrementar, aún más si cabe, su disponibilidad y vocación de servicio.
Por otro lado, las empresas de logística y transporte están experimentando un crecimiento del 50% en los envíos procedentes de comercio electrónico, un porcentaje que sitúa su nivel de tensión en los picos que se alcanzan durante el Black Friday. Así lo han confirmado desde UNO, que matiza que al elevado nivel de presión hay que sumarle que los flujos ahora son muchos más tensos y complejos por las dificultades de esta crisis sanitaria, lo cual está dificultando la operativa. Sin embargo, el crecimiento del e-commerce no compensa la caída de la actividad logística en general. La gran mayoría de las empresas no han podido suplir la caída del B2B con el aumento del B2C y, a las pocas que han podido hacerlo, no les compensa, pues la venta online se caracteriza por pedidos unitarios, lo cual es menos eficiente y más caro operativamente que el suministro a establecimientos, que es de grandes volúmenes y permite una mejor optimización.