Según ha mostrado Transport & Environment (T&E) en un análisis sobre la revisión de la Directiva sobre Energías Rnovables (RED): “¿Un cambio limpio para los combustibles de transporte de la UE?", el plan de la UE de incluir el hidrógeno verde en la combinación energética para 2030 podría aumentar la demanda de electricidad en casi una quinta parte.
El gas es el combustible marginal más común para tapar los huecos, esta estrategia sería terriblemente cara con los precios tan altos del gas
De este modo, T&E ha comunicado que además esto aumentaría la demanda de electricidad, en un momento en el que los precios de la energía están en el punto más alto, y que cualquier acrecentamiento de la producción de hidrógeno “sería imprudente si no hay más energías renovables”.
Además, han destacado que la red energética europea se está descarbonizando gradualmente con más energías renovables y menos electricidad alimentada por carbón y gas. Y que “si no hay más energías renovables ligadas a los objetivos del hidrógeno, sería probable que el plan de la Unión Europea haga que las energías renovables se desvíen de la red y que disminuyan las emisiones de los vehículos eléctricos al ensuciar más la red”.
