Estas son las grandes cifras de Michelin, que hace apenas unos días abrió las puertas de una de sus fábricas más importantes, la de Aranda de Duero, a la prensa especializada.
Y es que España es una referencia dentro del grupo Michelin, dado que cuenta con cuatro plantas y es el segundo polo a nivel mundial en toneladas producidas, por detrás sólo de Estados Unidos (y primero en Europa, por tanto).
La fábrica de Aranda se inauguró en 1970, y es uno de los pilares fundamentales de este éxito, dado que produce neumáticos de camión, autobús y metro, y además alberga un laboratorio de investigación único en el continente.
Pero no sólo de neumáticos vive Michelin, como quedó claro durante la jornada. Materiales sanitarios, pilas de combustible, impresión en 3D, nuevos componentes… De hecho, el Grupo prevé que, para 2030, entre un 20 y un 30% de su facturación no tendrá que ver con los neumáticos. De todo esto quizá cabría destacar su participación en Symbio para producir pilas de combustible e ir avanzando en el hidrógeno como solución sostenible.
La actualidad
Antonio Crespo, director comercial para Iberia, tomó la palabra para reconocer que “el mercado se enfrenta a grandes cambios y desafíos, puesto que los vehículos tienen que transportar más carga útil y a la vez consumir menos, los vehículos eléctricos son una realidad e irán llegando a la larga distancia, y la conectividad está a la orden del día”.
Por eso, destacó la nueva solución Michelin Connected Mobility, “que combina nuestro s120 años de experiencia en los neumáticos con toda una serie de servicios que aportan valor añadido al cliente, incluidos los de Michelin Connected Fleet, de manera que podemos adaptar la oferta a las necesidades de cada operador”.
La sostenibilidad es otro aspecto fundamental para Crespo. Como ejemplo, recordó que el primer neumático ‘verde’ de Michelin, allá por 1992, contaba con una resistencia a la rodadura de 12 kg/tn, “la menor por aquel entonces”, y que los actuales ya se sitúan por debajo de cinco, “una muestra de la continua innovación que aplicamos a nuestros productos”.
El reto se combina con “el mantenimiento de las mismas prestaciones durante toda la vida útil del neumático y el aprovechamiento de todo el material utilizado, algo que no es fácil”: En cualquier caso, en 2050 todos los neumáticos de Michelin se fabricarán con materiales sostenibles, y el camino ya ha comenzado: “Ya tenemos homologados modelos con más del 45% de estos compuestos”. Para finalizar su intervención, Crespo avanzó que en 2030 “mejoraremos nuestra eficiencia energética, por lo menos, en un 10%”.
La planta, al detalle
A Carlos Abril, director de la fábrica, le correspondió realizar un repaso por su historia, que ya acumula más de medio siglo, destacando que en 1970 “se produjo el primer neumático, que fue de camión, aunque entonces también se hacían de turismo”. En la década de los ’80 se vivió una etapa de crecimiento, manteniendo las gamas de camión y turismo e incorporando las llantas metálicas y el ensamblaje del producto, siendo en los ’90 cuando Aranda se especializó en vehículos industriales, incorporando el autobús y dejando atrás a los turismos.
Un poco más adelante, en la primera década de este siglo, se dejó la fabricación de las llantas, lo que supuso “una nueva muestra de nuestro compromiso social, pues se reubicó a unas 600 personas, todas las que tenían incidencia en aquella producción”, explicó Abril, añadiendo que en la década pasada, la de los años ’10, se incrementó la producción de neumáticos de camión y se acabó con los conjuntos montados.
Aranda tiene una capacidad de 7.000 neumáticos al día, aunque en la actualidad la cifra ronda los 6.400
Como datos significativos, en 2016 se alcanzó la cifra de 50 millones de neumáticos de camión y en el año 2020 se vivió “nuestro 50º aniversario, aunque con la pandemia no pudimos hacer mucho.
Con orgullo expuso el director que Aranda cuenta con 588.000 metros cuadrados, de los que 210.000 están construidos, y genera 157.000 toneladas anuales de neumáticos de camión, “la mayor del grupo”. Eso se traduce en una capacidad de 7.000 neumáticos al día, aunque en la actualidad la cifra ronda los 6.400. El respaldo de la marca se aprecia en los 20 millones de euros anuales que destina a nuestra innovación y mejora continua”.
Camión, bus y metro
En Aranda de Duero se fabrican todas las gamas de camión, dos para vehículos de pasajeros y también neumáticos para el Metro, que se utilizan en ciudades como París o Montreal, y también en la línea que conecta las dos terminales del aeropuerto de Madrid.
“Aproximadamente tenemos 100 dimensiones en el portfolio, lo que implica una importante flexibilidad y adaptación, ya que podemos llegar a rotar hasta 40 diarias”, según Abril. En este sentido, quiso destacar que “todos los puestos de la fábrica pueden ser ocupados por cualquier persona, sin importar su sexo o edad”, añadiendo que el 26% de la plantilla son mujeres.
Y, de cara al futuro, la sostenibilidad lo marca todo: “Trabajamos para transformar nuestras infraestructuras y procesos a lo que demande el mercado, sobre todo en cuanto a los materiales y a las características de los vehículos eléctricos. Contamos con dos equipos de expertos que se dedican a pensar y desarrollar esas innovaciones, que luego se trasladan al resto de plantas, y con un Laboratorio que busca lo que no existe, que pretende captar talento y que es compartido por estudiantes que vienen a desarrollar sus ideas y proyectos”.
Una vez completada la visita a la fábrica y a todos sus procesos (como detalle, cuenta con 226 ‘ollas’ de cocción de neumáticos), Antonio Crespo concluyó apuntando que “el primer semestre no fue demasiado bueno, dado que los distribuidores contaban con mucho stock, pero la actividad de transporte ha seguido creciendo y la demanda en el segundo semestre va a ser mucho mejor. Esperamos un cierre de año por encima del anterior”.
