El convenio, que tendrá una vigencia de tres años, permitirá a los castellano-manchegos seguir accediendo a los servicios de transporte prestados por el Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid, además de los servicios de cercanías y de transporte por carretera desde sus localidades de origen hasta Madrid. Actualmente, 86.000 castellano-manchegos utilizan el abono transportes madrileño.