Salvini ha explicado que, bajo el Reglamento 1073/2009, los servicios de transporte internacional de viajeros en autobús y autocar proporcionados por empresas europeas en un Estado miembro distinto a aquel donde la empresa tenga su sede, están sujetos al sistema fiscal del país donde se presta el transporte y que cuando un viaje pase por más de un país, cada Estado miembro puede pedir el correspondiente pago del IVA pero solo por la parte del viaje que se haya hecho dentro de sus fronteras.
Teniendo esto presente, el eurodiputado ha denunciado que un gran número de empresas que operan en Italia están registradas en países de Europa del Este, lo que les permite disfrutar de una ventaja injusta sobre los competidores que operan en la misma área geográfica pero que están sujetos a la mucho más onerosa fiscalidad italiana. Además, Salvini se ha quejado de la casi inexistencia de controles por parte de las autoridades italianas permite que muchas de estas empresas puedan fácilmente evitar el adecuado pago de los impuestos por los servicios que prestan en Italia, permaneciendo invisibles para el fisco italiano y practicando de este modo una competencia desleal e injusta. Por ello Salvini ha preguntado a la Comisión Europea si está al tanto de esta situación que está fomentando la deslocalización y la evasión de impuestos, si sabe que existe esta ausencia de controles en el sector y qué pasos planea tomar para redirigir la situación.
La respuesta
El comisario europeo responsable de fiscalidad, Pierre Moscovici, le ha respondido informando que la Dirección General de Fiscalidad y Unión aduanera de la Comisión Europea publicó el 15 de enero de este año un estudio que incluye un análisis de las distorsiones de la competencia en las empresas de autobuses y autocares y que será discutido próximamente por los Estados miembros y las partes interesadas. Moscovici ha explicado que el estudio revela que en Italia solo los servicios nacionales de transporte en autocar están sujetos al IVA, mientras que los internacionales están exentos y sólo puede haber un tratamiento fiscal diferente con respecto a la deducción del IVA soportado. Así, el comisario ha argumentado que las empresas de transporte en autocar tienen que registrarse en principio para el IVA en Italia, pero también pueden solicitar una exención a las autoridades fiscales.
En cualquier caso, Moscovici ha aclarado que el estudio no evalúa el funcionamiento de las inspecciones fiscales puesto que esas actividades son competencia exclusiva de las autoridades nacionales. Así, el comisario ha defendido que el estudio calcula el impacto de las distintas opciones de políticas, que incluyen la opción de cambiar el lugar de imposición fiscal al del Estado miembro de llegada o de salida del servicio. Una vez que se haya discutido el estudio, Moscovici ha anunciado que la Comisión considerará qué acciones tomar.
Por su parte, la eurodiputada popular alemana Angelika Niebler también se ha quejado a la Comisión de las diferencias en trámites administrativos relacionados con el IVA que existen en los Estados miembros, lo cual repercute enormemente en la carga administrativa y burocrática de las empresas de autocares que hacen servicios turísticos transfronterizos cada vez que visitan un país. La Comisión le ha respondido justificando que por esa razón y muchas otras se decidió llevar a cabo el estudio que Moscovici le mencionaba a Salvini y del que Fenebús informó en su digital nº 373.
