La aprobación de un régimen transitorio se produce para reducir de un 20% a un 5% de media el impacto de precio que podrían alcanzar los automóviles con el WLTP, debido al cambio de fiscalidad por tener mayores emisiones que con la homologación anterior.
Para el presidente de Ganvam, Lorenzo Vidal de la Peña, el hecho de que el Gobierno se haya posicionado en la misma línea que otros países europeos que han optado por este tipo de medidas pone de manifiesto que ha escuchado al sector después de semanas de negociación y que hay voluntad política de seguir haciéndolo porque aunque “estamos ante una decisión bienvenida y valorada hay que seguir trabajando” pues lo deseable sería que en lugar de parchear las medidas de Bruselas, se pusiera en marcha una reforma fiscal que trasvase la presión impositiva de la compra al uso.
"El ensayo WLTP dará como resultado mayores datos de consumo y emisiones de CO2 para un mismo vehículo"
En este sentido, Vidal insiste en la necesidad de eliminar el Impuesto de Matriculación, máxime cuando de los grandes mercados europeos, España es el único con un gravamen de este tipo, lo que reduce artificialmente el tamaño de su mercado potencial. Al eliminarlo, se ayudaría a consolidar la demanda interna a largo plazo al no penalizar la compra. Además, como actualmente sólo tres de cada diez vehículos pagan este impuesto, la merma económica para Hacienda no solo sería reducida, sino que se vería compensada por la demanda adicional generada.
Dado que la supresión del Impuesto de Matriculación no es sencilla de articular, pues va contra la línea de flotación de las cuentas de las comunidades autónomas que lo tienen transferido, Ganvam propone reorientar el Impuesto Municipal de Circulación para que se base en las emisiones en lugar de en la cilindrada y la potencia. Al vincularlo al CO2 y a la normativa EURO se asociará a la antigüedad del coche y, por tanto, se establece un sistema justo de discriminación del coche por su potencial contaminante.
Anfac valora positivamente una transición ordenada hacia el nuevo WLTP
"El ensayo WLTP dará como resultado mayores datos de consumo y emisiones de CO2 para un mismo vehículo, dato que podría impactar en el Impuesto de Matriculación, que se calcula en función de estas emisiones. No quiere decir que estos automóviles consuman más, porque los modelos son los mismos, sino que las reglas de medición son más exigentes", según Anfac.
Anfac valora positivamente la aprobación de esta ampliación del periodo de transición entre las dos normativas. De este modo, tal y como destaca Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de Anfac, esta medida limita la posible caída de la demanda que se hubiera producido por un incremento de la tributación sobre cada automóvil nuevo y consigue un “entorno de estabilidad para el mercado para los próximos años”.
Esta medida está en línea con el marco europeo y con las políticas de otros países del entorno. Así, los países que tienen una fiscalidad directamente ligada a las emisiones de CO2 están tomando medidas de este tipo para mitigar, en la medida de lo posible, el impacto directo del WLTP. La asociación asegura que este periodo de transición es especialmente relevante porque el incremento de la tributación que suponía la implantación del WLTP era muy negativa para los vehículos que se fabrican en España, que suponen un 24% del total de las matriculaciones.