El 20% del presupuesto no se ha agotado
De hecho, las líneas presupuestarias destinadas a la compra de vehículos nuevos conservan aún casi un 20% sin agotar, y en el caso de determinadas Comunidades Autónomas como Baleares, Navarra, Cantabria, Castilla-La Mancha o Extremadura este porcentaje supera incluso el 50%. La gran mayoría de adquisiciones de vehículos no contaminantes están teniendo lugar de la mano de las grandes empresas, que representan el 1% del Sector, pero las más pequeñas siguen considerando que este es un paso muy complejo pese a las ayudas.
Esto está lejos de deberse a falta de conocimiento por parte de los profesionales, pues las ayudas destinadas al achatarramiento están prácticamente agotadas en todas las Comunidades Autónomas. Debe entenderse pues que el motivo es la falta de interés por parte de los transportistas, que no ven incentivos suficientes pese a esta compensación económica.
Asimismo, alrededor de dos tercios de los nuevos vehículos financiados por esta convocatoria han sido autobuses. Esta proporción, no obstante, no se corresponde con la realidad del secor en nuestro país, pues la flota de camiones en España es seis veces mayor que la de autobuses.
Peticiones desde el sector
Esto ha llevado a que asociaciones como Fenadismer insistan en la necesidad de un plan que financie la adquisición de vehículos de transporte propulsados por cualquier tecnología, incluidos los diésel de última generación. Según aseguran, esta medida ayudaría, aunque en menor escala, a cuidar el medioambiente y a renovar las flotas actuales, cuyo envejecimiento comienza a ser preocupante. Si en 2007 la edad media de las cabezas tractoras era de 4,7 años, el dato ha llegado a los 8,1 en 2023, mientras que los camiones rígidos tienen ahora una edad media de 14,8 años frente a los 5,9 de 2007.