75.000
euros es el coste de los daños estimados en la provincia de Sevilla.
"A pesar de que se contemplan medidas de sanción en los pliegos de las licitaciones, estás nunca se cumplen, a pesar de las reclamaciones de las empresas de transporte, asegura Manuel Gutiérrez Zambruno, presidente de Atedibus. "Y por ello, solicitamos que Apae asuma estas reparaciones como prestador del servicio y que reclame a los centros esos daños. Las empresas no pueden asumir más esta situación".
Desde la asociación recuerdan que en los pliegos del concurso escolar se señala expresamente que "los centros que dispongan de transporte escolar, a fin de garantizar el uso adecuado de este servicio, deberán recoger en su Proyecto Educativo las normas de convivencia, de organización y funcionamiento", así como que "establecerán las medidas preventivas y correctoras oportunas". En base a este texto, interpretar que corresponde a los centros escolares corregir el comportamiento y articular las medidas que procedan para garantizar el uso adecuado del servicio, algo que creen que no siempre se está llevando a cabo.
Sanciones que nunca se aplican
Además, añaden cada alumno de centro público en Andalucía forma parte de diferentes pólizas de responsabilidad civil para este tipo de cuestiones, considerando que deberían ser aplicadas cuando la gravedad de los hechos así lo requiera. Hay establecida una serie de sanciones que deberán asumir los padres que llegan a establecer multas de 100 euros por alumno, pero, según Gutiérrez, "la realidad es que nunca se ponen sanciones, aunque lo denuncie el transportista".
"En el curso anterior y lo que se lleva transcurrido del presente, se han computado más de 75.000 euros en daños, que tiene que pagar la pyme del transporte en un servicio público vital con un margen de lo más ajustado", comenta. "Muchos de estos bienes en los vehículos no entran en las pólizas de seguro habituales por su enorme coste o por la negativa de muchas de las aseguradoras, con lo que el coste de cada reparación es más que considerable"
Por todo ello, desde la asociación se han solicitado fórmulas para compensar a las empresas y atender las reparaciones necesarias, así como que se que impulsen cursos y charlas de nociones básicas de comportamiento al inicio de cada curso, con el objetivo de fomentar trayectos seguros y sin incidencias, velar por la seguridad vial de todos y evitar daños en los bienes comunes que se usan durante el curso escolar.