El "Manifiesto IRU 2024-2029" resalta un aumento significativo en las matriculaciones de vehículos eléctricos en la Unión Europea, lo que refleja un progreso notable hacia la descarbonización del transporte por carretera. En 2023, las matriculaciones de camiones eléctricos aumentaron un 234.1%, mientras que las de autobuses eléctricos crecieron un 39.1%. Sin embargo, la IRU advierte que este crecimiento podría verse obstaculizado por la falta de infraestructura adecuada para apoyar la transición hacia una movilidad más sostenible.
La transición hacia un transporte descarbonizado debe ser gradual
El documento señala que la red de recarga para vehículos eléctricos es insuficiente y que la red eléctrica actual no está preparada para soportar la demanda que generará una flota creciente de vehículos eléctricos y de hidrógeno. Además, la IRU destaca que la expansión de la infraestructura de recarga y la modernización de la red eléctrica son esenciales para asegurar que la transición a una flota más limpia no se vea comprometida.
Por una infrastructura de carga robusta
La IRU insta a la Unión Europea a coordinar esfuerzos para desarrollar una infraestructura de recarga robusta y accesible en toda la región, asegurando que esté disponible en todas las rutas principales de transporte. También hace un llamado para que se implementen incentivos financieros y normativos que faciliten la adopción de vehículos eléctricos por parte de los operadores de transporte.
A pesar del avance en la adopción de tecnologías más limpias, la IRU enfatiza que la transición hacia un transporte descarbonizado debe ser gradual y apoyada por políticas realistas que tomen en cuenta las realidades operativas del sector. De lo contrario, advierte la organización, se corre el riesgo de crear una disparidad entre los objetivos ambientales y la capacidad real del sector para cumplir con ellos.