Concretamente, los camiones ligeros cayeron un 46,5%, los medios un 48,9%, y el conjunto de los pesados un 47,6%, lo que hace que el total se quede en un inquietante 47,8%. Destacan sobre manera los rígidos de obra, que cifran su caída en un 66,6%, y dejan el acumulado del año en un preocupante 44,1%.
Que la construcción no está en su mejor momento es de dominio público, pero un descenso de las matriculaciones de tal magnitud podría conllevar otros efectos entre los fabricantes, que lo están pasando realmente mal. Incluso las tractoras, que parecían las únicas en aguantar el tipo al finalizar el primer semestre, también han entrado en una espiral negativa, perdiendo un 46% en agosto y dejando el acumulado de los primeros ocho meses en un -12,1%, frente al -18,3% del conjunto de más de 3,5 toneladas.
Posicionamiento de las marcas
Respecto a los camiones ligeros de 3,5 a 6 toneladas, destacan Isuzu con una variación respecto al mismo periodo del año anterior de 14,29%; Iveco tiene un -24,27%, Mercedes un -16,91%, Mitsubishi un 37,50%, Nissan un -19,90%, Peugout un -80%, Renault un 160% y Volkswagen un 21,54%; esto hace un total de -14,42. Los tractocamiones por su parte, son los que mejores resultados han obtenido, con un total de -12,07 de variación entre un año y otro. En el lado más negativo se encuentran los camiones rígidos de más de 16 toneladas que registran unos porcentajes muy poco alentadores (-28,96%, ) como es el caso de DAF, que tiene una variación entre 2007-2008 de -37,21%, Iveco consigue un -34,51% y Volvo, que llega a la cifra más positiva del segmento, -10,03%.