Según ha publicado la agencia EFE, Martínez-Cañavate ha indicado que, en este marco de descenso, el único combustible que se está manteniendo es el queroseno, destinado a la aviación.
En relación a la refinería La Rábida en particular, considera que "no son tiempos buenos para el mundo del refino porque hay exceso de capacidad en Europa, pero esperamos que con la situación que tenemos y haciendo bien las cosas seamos de los que podamos mantener la refinería en unos niveles de producción competitivos y salir fortalecidos".
Por ello, se está abogando por destinar "gran parte de la producción a la exportación", algo que esperan incrementar, concretamente a la Estados Unidos, en lo que ha combustibles se refiere, y al norte de África y el resto de la Unión Europea, en asfaltos.