El presidente echa la vista atrás y recuerda que “desde que comenzó la pandemia, y especialmente después de superar el peor periodo, el del confinamiento, la demanda de transporte ha ido en aumento, incluso por encima de las expectativas. Sin embargo, el incremento de los costes, y no solo del combustible, sino también de otros aspectos como los propios vehículos o los neumáticos, han hecho que la rentabilidad del Sector sea mínima, con algunas empresas trabajando incluso a pérdida”.
A esto se suma “el desequilibrio existente a la hora de negociar los contratos de transporte con los clientes, dada nuestra posición de debilidad, cuestiones que se ven agravadas por el deterioro de las condiciones de trabajo y la creciente escasez de conductores”.
‘Los acuerdos suponen una mejora en la cultura del Sector, una herramienta para eliminar desequilibrios y mejorar las condiciones laborales’
También explica De la Roza que “durante muchos meses, no fue posible avanzar en las mesas de diálogo con los cargadores, que solo se avenían a acercar posturas en lo relacionado con pesos y dimensiones. Fueron muchas las reuniones sin éxito, así que al final dirigimos nuestras quejas a la Administración. Todo esto derivó en la convocatoria de paro de julio de 2020, que se canceló gracias a los 12 puntos del plan de impulso al Sector acordados entonces con el Ministerio que dirigía José Luis Ábalos. Sin embargo, el tiempo fue pasando sin ningún cambio, y por eso, tras casi un año y medio, tuvimos que volver a amenazar con parar”.
Al final, “lo que durante meses nos dijeron que no era posible, se aceleró en diciembre hasta cerrarse unos acuerdos que considero muy buenos para el Sector. Ahora, lo que nos queda es exigir que tanto el espíritu como la letra de los acuerdos se respeten en el Real Decreto que debe aparecer a finales de febrero, que se cumpla con lo pactado. Espero y confío en que así será, porque de lo contrario, nos encontraríamos con una situación muy preocupante”.
De hecho, el borrador parece estar prácticamente acabado, “aunque en el Comité aún no hemos tenido acceso. Los días van pasando y necesitamos conocerlo para poder consensuarlo. También es cierto que sabemos la presión que están ejerciendo los cargadores para que el texto definitivo sea un poco más afín a sus intereses, pero nosotros tenemos clara una cosa: en el futuro, seguiremos negociando con los cargadores, por supuesto, pero no sobre los puntos que recogen los acuerdos, que ya están cerrados. Estos acuerdos supondrán un gran cambio, incluso para la propia cultura del Sector, por la mejora en las condiciones laborales y por el equilibrio en las negociaciones de los contratos. Nos facilitan unas herramientas que tenemos que aprender a utilizar”.
Precios del combustible
En otro orden de cosas, De la Roza considera que “la subida del precio del combustible no tiene visos de cesar, al menos en el primer semestre del año, lo que nos está generando una gran incertidumbre. Por eso, en los acuerdos solicitamos al Gobierno el mismo tratamiento para todos los combustibles, porque aquellas compañías que apostaron por el gas natural, ahora están viendo comprometida su competencia, ya que es muy difícil trasladar a los precios unas subidas tan significativas”.
Como conclusión, el presidente de CETM afirma que “estamos ante un periodo de muchos cambios para el Sector, de profundo calado, pues a todo lo comentado podemos añadir la trasposición de la directiva de trabajadores, el reparto de los fondos europeos… El entorno es muy complejo, y aunque el Sector ha demostrado su capacidad para seguir adelante, es importante que sentemos las bases para un futuro mejor”.
