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El nuevo tacógrafo sigue dando problemas

El nuevo tacógrafo sigue dando problemas

Tras la falta de stock del año pasado, sigue generando incetidumbre en el Sector

viernes 12 de enero de 2024, 07:00h

La entrada en vigor del nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación sigue dando quebraderos de cabeza al Sector. Ya en 2023 muchos fabricantes no pudieron equiparlo en sus vehículos debido a la falta de stock, lo que obligó a la Dirección Gneral de Tráfico (DGT) a habilitar un régimen extraordinario de prematriculación, permitiendo que los vehículos matriculados entre el 21 de agosto (fecha límite original) y el 31 de diciembre recibiesen una fecha de matriculación anterior para evitar incumplir la normativa europea.

No obstante, esto ha generado un nuevo problema, pues los vehículos afectados por este régimen excepcional no saben ahora la fecha en la que deben pasar su priemra revisión técnica de la ITV. Dado que en su documento se recogen las dos fechas de matriculación, la real y la anterior al 21 de agosto, su plazo para someterse a este proceso no está claro, lo cual obligará a Tráfico o Industria a dictar una resolución aclaratoria con respecto a una situación que afecta a alrededor de 5.000 vehículos.

Más de 140.000 vehículos tendrán que cambiar sus tacógrafos

A su vez, los aproximadamente 2.000 vehículos destinados al transporte internacional tendrán que sustituir el tacógrafo que los fabricantes han instalado por un tacógrafo inteligente de segunda generación antes de agosto de 2025, un proceso que requerirá un coste que, a día de hoy, no se sabe quién va a tener que asumir. También tendrán que realizar una sustitución aquellos que lleven un tacógrafo analógico o digital anterior al 15 de junio de 2019, que tendrán que cambiarlo antes del próximo mes de diciembre, mientras que los vehículos que usen un tacógrafo inteligente de primera generación deberán realizar dicha modificación antes de agosto de 2025.

Según estimaciones realizadas por Fenadismer, existen más de 140.000 vehículos en España que se verán afectados por estos cambios, de los que 130.000 son camiones o cabezas tractoras y 10.000 son autobuses. Estos tendrán que reemplazar sus tacógrafos en los plazos mencionados, a no ser que sus propietarios decidan renovarlos y adquirir vehículos nuevos.