El Comité de Transporte y Turismo del Parlamento Europeo ha refrendado su postura sobre la Directiva de Licencia para Conducir de la UE, estableciendo un desarrollo crucial para abordar la escasez de profesionales cualificados en el sector del transporte por carretera. Esta revisión tiene como objetivo eliminar obstáculos y facilitar el acceso a la profesión, introduciendo medidas como permitir que los graduados de 17 años conduzcan camiones bajo la supervisión de un conductor experimentado.
Entre las reformas acordadas se encuentra el establecimiento un proceso único y simplificado para reconocer licencias de conducir de terceros países. Además, los Estados miembros ahora tienen la opción de reducir la edad mínima para los conductores de autobuses a 18 años sin imponer restricciones de distancia.
Se estima que faltan 600.000 conductores en toda Europa
"Lo que la Unión Europea necesita son conductores seguros y debidamente formados" afirmó Raluca Marian, directora de defensa de IRU en la Unión Europea. "Para que esto sea posible, los jóvenes candidatos profesionales deben tener la posibilidad de familiarizarse con las operaciones diarias profesionales y los requisitos de seguridad. La conducción acompañada no consiste en reducir la edad mínima para conducir, como algunas organizaciones han presentado de forma engañosa. Es un plan de formación bajo la supervisión de conductores profesionales experimentados que incentivará a jóvenes licenciados que, de no tener esa oportunidad, optarían simplemente por otra profesión".
Marian celebró también la simplificación de los procesos para reconocer conductores de terceros países, pues esta se considera una medida clave para acabar con la escasez de conductores del continente: "Nuestro sector necesita más conductores. Aunque damos prioridad al talento local, incluidos los conductores jóvenes y las mujeres, la brecha es tan grande que no podemos superar la escasez sin conductores de terceros países. Acogemos con satisfacción la visión del Parlamento de proporcionar a los conductores de terceros países un conjunto completo de reconocimientos que les permita trabajar en la UE. Como IRU ha declarado en repetidas ocasiones, reconocer el permiso de los conductores de terceros países sólo resolvería la mitad del problema. Un conductor profesional no puede conducir en la UE a menos que también tenga un CAP reconocido".
El Comité ha respondido además a las demandas del transporte colectivo de pasajeros de eliminar el límite de 50 kilómetros para conductores de autobuses y autocares menores de 21 años, aclarando además que la edad de inicio para conductores profesionales de autobuses y autocares con formación completa es de 21 años, en lugar del límite actual de 24. Desde el Sector confían en que estas reformas contriubyan a abordar los desafíos en la fuerza laboral del transporte.