En una reunión celebrada la semana pasada en el Parlamento Europeo en Bruselas, miembros del Parlamento Europeo (MEP) y representantes de la Asociación Americana de Camiones (ATA) discutieron los desafíos y enfoques para la descarbonización del transporte comercial por carretera en Europa y Estados Unidos. Durante el debate, se intercambiaron opiniones sobre la descarbonización de los camiones pesados, el desarrollo de estándares para camiones y el papel de la contabilidad de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en este proceso.
La Unión Europea más abierta a la neutralidad en comparación con California
El evento cobró importancia debido a las negociaciones en curso en la UE sobre el futuro de las flotas pesadas y la definición de posiciones por parte de los legisladores. La eurodiputada Marian-Jean Marinescu fue la anfitriona del evento. Representantes de ATA, como Chris Spear, presidente y director ejecutivo, y Andrew Boyle, presidente de ATA y copresidente de Boyle Transportation, estuvieron presentes para disipar los mitos relacionados con los estándares y objetivos de California para los vehículos eléctricos. ATA argumentó que los estándares y objetivos de California no son realistas y que su falta de infraestructura de carga, baja aceptación en el mercado y escasez de productos llevarán a un aumento de las emisiones de carbono. Según Andrew Boyle, la Unión Europea está más abierta a la neutralidad tecnológica y a los combustibles alternativos en comparación con California y algunos miembros del gobierno federal de Estados Unidos.
Estándares de emisiones
Ambas partes del debate enfatizaron la necesidad de estándares de emisiones pragmáticos que tengan en cuenta las realidades operativas, económicas y empresariales. También subrayaron la importancia de la neutralidad tecnológica y la amplia gama de combustibles alternativos como solución para la descarbonización del sector. La falta de infraestructura de abastecimiento de combustibles alternativos y los costos asociados también fueron mencionados como preocupaciones. Raluca Marian, directora de Incidencia de la UE de IRU, expresó su satisfacción con la propuesta de establecer normas para 2027 y la posibilidad de revisar y ajustar los objetivos según sea necesario.
En cuanto a la contabilidad de las emisiones de GEI en el sector del transporte, tanto Estados Unidos como la UE están implementando programas para realizar un seguimiento y reducir las emisiones. Estos esfuerzos recibieron el reconocimiento de los participantes como importantes para reducir la huella ambiental y aumentar la eficiencia operativa de los operadores de transporte. En conclusión, el debate entre EE. UU. y la UE sobre la descarbonización del transporte comercial por carretera es beneficioso ya que ambos enfrentan desafíos similares y la necesidad de encontrar soluciones prácticas y pragmáticas. IRU continuará facilitando diálogos interregionales como parte de su objetivo de lograr que el sector del transporte sea neutro en carbono para 2050.