La Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic) acaba de publicar los resultados de una encuesta realizada entre sus empresas afiliadas (240 de las de mayor tamaño en nuestro país), con el objetivo de conocer cuáles son sus previsiones para el ejercicio en curso.
Una pregunta con fácil respuesta: el algo "insostenible"
Y la mayoría, un 61,5%, califica como ‘negativa’ la evolución económica en España en 2024, previendo un descenso de la demanda de servicios de transporte de mercancías por carretera. “Una previsión poco halagüeña que se ve agravada en el terreno de la sostenibilidad económica de estas empresas por el continuo aumento de sus costes: el 96,2% augura una subida significativa de sus costes generales de operación, especialmente los operativos” durante este año.
“La actividad económica está íntimamente ligada al trabajo de los camiones pesados, por lo que se podría decir que este Sector es el ‘termómetro de la economía’”, explica Ramón Valdivia, vicepresidente ejecutivo de Astic y miembro del Comité Ejecutivo de Presidencia de IRU.
Los agricultores
El panorama podría ensombrecerse aún más por las consecuencias que puedan derivarse de las movilizaciones agrícolas, tanto en Francia durante los últimos días, como en España y otros países comunitarios en los próximos, aunque Valdivia espera que “el Estado español, a diferencia de lo que hizo el francés, garantice la libre circulación de mercancías por todo el territorio nacional y, por supuesto, la seguridad de nuestros conductores que cada día prestan servicio a la sociedad a bordo de sus camiones”.
Ramon Valdivia, a la izquierda, junto al presidente de Astic, Marcos Basante.
Según la encuesta, apenas el 23,1% de los asociados de Astic confía en que su actividad crezca durante 2024; mientras otro 23,1% prevé que decrezca; y un 42% no augura variaciones significativas entre 2023 y 2024.
Pero cuando se trata de los costes, la mayoría (96,2%) declara que continuarán subiendo “significativamente” a lo largo de este año, por sólo un 3,8% que no prevé que se produzca “un alza de costes importante”. “Entre las primeras, el 77% piensa que estos costes aumentarán entre un cinco y un 10%; pero hasta un 8% de los encuestados opina que estos costes se incrementarán entre un 10 y un 15 %”.
La IRU afirma que los costes del Sector han aumentado en todos los ámbitos durante los últimos tres años: mano de obra (+28,2%), mantenimiento y reparación (+20,4%), neumáticos (+21,6%), piezas de repuesto (+13,5%) y seguros (+8,7%). En este sentido, Valdivia recuerda que “habría que añadir también los relacionados con las cotizaciones sociales, el precio de los camiones, el coste financiero y los nuevos peajes basados en las emisiones de CO2 que países como Alemania ya han puesto en marcha desde el pasado 1 de diciembre; un sistema tarifario hasta un 83% más caro para los transportistas que el de antes”.
Márgenes y flota
El 42% de los encuestados ve “poco probable” y “muy poco probable” que sus ganancias aumenten en 2024 respecto al pasado año, por un 38% que espera que crecerán “probablemente” y “muy probablemente”. Por esa razón, sólo el 35% considera que la capacidad de su compañía para mejorar su margen de beneficio por servicio de transporte prestado en 2024 se contraerá, frente al 7,7% que confía en que sus márgenes crecerán.
Otros datos relevantes de la encuesta de Astic es que el 46% de los asociados se plantea renovar flotas y un 15,4% espera incrementarla, mientras que el 73% no prevé aumentar su plantilla. A esto se suman, para concluir, los asuntos que más preocupan a los socios de la entidad: “escasez de conductores profesionales, incremento de los costes sociales/laborales, armonización legislativa europea y nacional, la falta de áreas de descanso y parkings seguros para camiones, la transición energética y los peajes”.