Así, Isuzu Motors Limited (Isuzu), Toyota Motor Corporation (Toyota), Hino Motors, Ltd. (Hino) y Commercial Japan Partnership Technologies Corporation (CJPT) han anunciado esta planificación conjunta, en la que no participará Denso, incluido en el acuerdo para la gama pesada.
El objetivo que se marcan estas compañías es contribuir a la creación de una sociedad del hidrógeno, así como a la neutralidad del carbono, ampliando las opciones disponibles para el uso de los clientes y aumentando la demanda de hidrógeno. Las empresas también promoverán la introducción en el mercado de los camiones eléctricos de pila de combustible, así como su uso generalizado.
Múltiples opciones
En el camino hacia la neutralidad de carbono, hay varias opciones de trenes motrices que satisfacen las demandas de los clientes, incluyendo los HEV, los BEV y los FCEV, dependiendo de las condiciones energéticas de los diferentes países y regiones y de cómo los clientes utilizan sus vehículos.
Japón apuesta por el impulso al hidrógeno en diferentes segmentos
El uso de la tecnología FC, que funciona con hidrógeno de alta densidad energética y tiene cero emisiones de CO2 durante la conducción, se considera eficaz para las condiciones de funcionamiento de este segmento, vehículos equipados con funciones de refrigeración y congelación, y que deben recorrer largas distancias durante extensas jornadas de trabajo diario para realizar múltiples operaciones de reparto.
Ideas claras
Toyota ha tomado una decisión en
favor del hidrógeno, y la lleva a efecto en todos los segmentos
CJPT se encargará de planificar el desarrollo conjunto de los camiones eléctricos de carga ligera de FC para el mercado de masas, aunque las cuatro empresas aportarán sus conocimientos (la tecnología de camiones que Isuzu e Hino han acumulado a lo largo de los años, así como la tecnología de FC de Toyota) en la búsqueda de productos que cumplan las prestaciones y condiciones requeridas para los camiones ligeros.
Su llegada el mercado está prevista para enero de 2023, en principio para labores de distribución reales en Fukushima y en proyectos de implantación social de Tokio, indican las empresas participantes en este proyecto.
